HANS LODEIZEN

Naarden-Holanda, 1924-Lausana, 1950

ESCUCHA

escucha:
cuando todavía vivía
con él y juntos construíamos
el mundo tejiendo y deshilachando
cuando tenía junto a mí sus ojos
y sus manos blancas
entonces bendije la nieve
y reí bajo la lluvia

cuando pasaba las tardes
en su habitación y me paseaba
en su cuerpo o me sentaba, leía un libro
o dormía, cuando conocía el camino
de su oído y navegaba por el río
de sus ojos cuando jugaba con
sus manos y deambulaba por sus labios
a menudo me topé conmigo mismo,
riendo y llorando o diciendo cosas.
pero,
al llegar el otoño él se fue
y ahora yo mismo ya no soy porque me fui con él
mis manos estrecharon sus manos
quedé prisionero de sus ojos
quedé enredado en sus oídos
quedé perdido en su cuerpo
ahogado en su cuerpo.

Hans Lodeizen (extraído de: Het innerlijk behang en andere gedichten [El empapelado interior y otros poemas], 1952)
© Traducción española: Diego J. Puls (en colaboración con Carmen Bartolomé Corrochano), publicada en «Poesía contemporánea en lengua neerlandesa», Stichting Ons Erfdeel, Rekkem (Bélgica), 1993.



Comentarios